viernes, 10 de julio de 2009

Recorriendo los senderos de tu piel sin rumbo fijo

como perdida en la inmensidad del bosque en la mañana

permanentemente acariciada por el ciclón de tus manos

y humedecida en la lluvia de tus interminables besos



Hoy como ayer parte de tu universo como átomo incosciente

simplemente viviendo el vaivén de las explosiones atómicas

hoy como siempre sin preguntas ni respuestas ni mañanas

simplemente recostada en la suavidad de la existencia misma



Redisfrutando amaneceres y reobservando soles fluorescentes

como arcoiris absorventes de la luz de veleidades sin sentido

Redimensionando los sentidos en cada montículo de tu cuerpo

explorador desprevenido y escultor de sensaciones sorprendentes