sábado, 1 de octubre de 2011


Tengo miedo de tus brazos
Que amurallan sin quererlo
Los caminos tan planeados
Los espacios siempre etéreos
Tengo miedo de tu boca
Que me ahoga en tu humedad
Que me pierde entre tu lengua
Que ensombrese mis ideas
Tengo miedo de mí  misma
En la imagen de tus sueños
Que se vuelven circunstancia
Donde al fin acepto un dueño.