sábado, 8 de octubre de 2011

NO HACE FALTA MÁS


Recostada y casi inmóvil al ocaso del día
Recorro tus caricias sobre mi piel temblorosa
Una y otra vez mientras ensancho el alma
Con cada bocanada de tu hurtado aliento
Disfruto esta sensación de vasta complacencia
Vibro evocando tu cuerpo en mi cuerpo
Rebroto en tu humedad que aún contengo
Contemplo en tu mirada fantasías y deseos
No necesito otro clímax más que tu recuerdo
Ni otras manos que las de tus anhelos rendidos
No necesito alboradas que iluminen destinos
Ni tampoco melodías resonando en mis oídos
Porque llevo el mundo todo en la memoria
De cada sensación que sobre tu piel habita
Y tanto me llena tu pasión eternamente altiva
Que no hace falta más que abandonarme en ti…
                                                                                                  … mi vida.